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La certificación de personas es uno de las vías para la capacitación profesional que menos visibilidad tiene. Convencionalmente siempre pensamos en los estudios reglados (F.P., estudios universitarios…) y las pruebas convocadas anualmente por los organismos territoriales competentes (OTC) de las Comunidades Autónomas.

España es uno de los países de la Unión Europea que más ha desarrollado la opción de la certificación de personas en distintos ámbitos profesionales que tenían un déficit de personal capacitado.

¿Qué es la certificación de personas? Aunque suene extraño, no es más que la demostración de disponer de los conocimientos y habilidades necesarios para desempeñar una actividad.

Los expertos afirman que dicha opción para la capacitación profesional es la más ecuánime, puesto que aquellos que desean desempeñar una actividad cualquiera deben superar de manera objetiva los requisitos tanto normativos y teóricos como prácticos.

La norma que regula dicha acreditación es la UNE-EN 17024:2012 y la misma no solo describe los pasos a seguir para certificarse sino que obliga a aquellas personas que opten por dicha vía a estar en continua mejora puesto que es necesario seguir demostrando tras un periodo de tiempo que se conocen los cambios normativos existentes en la actividad profesional donde se desempeña la actividad para la cual están certificados.

En España la mayoría de las acreditaciones a disposición están vinculadas a temas técnicos o tecnológicos pero poco a poco se abre la vía para otras figuras.

Más de 3.000 personas al año obtienen su capacitación profesional a partir de la certificación de personas ofrecida por entidades acreditadas por ENAC.

La calidad en la prestación del servicio de los futuros profesionales está garantizada por la vía de la certificación de personas.

 

Oviedo, 17 de Diciembre de 2019.

Francisco Collantes Lopez.

Director de Certificación - ASELAR ENTIDAD CERTIFICADORA S.L.